La Universidad Metropolitana de Monterrey reconoce y respeta el derecho que todos los empleados de la Institución tienen para participar fuera de sus puestos de trabajo en otros negocios, actividades financieras o personales, en asociaciones, actividades recreativas y de esparcimiento en general. El ejercicio de este derecho no debe interferir con sus puestos y responsabilidades como empleados de la UMM o cometer actos que desacrediten la reputación de la Institución.
Un conflicto de intereses puede ocurrir cuando las actividades externas, las relaciones familiares o interpersonales, los negocios o intereses personales pueden influir o parezcan que influyen en la capacidad del empleado para tomar decisiones objetivas en el ámbito de su competencia en la UMM.
Las áreas de decisión de la UMM y sus titulares se regirán siempre por los criterios de imparcialidad y la guía de juicio objetivo que marcan las políticas de la Institución y sus procedimientos.
Algunas situaciones en las que los conflictos de intereses pueden surgir se mencionan a continuación:
Los empleados están obligados a comunicar la existencia de cualquier potencial conflicto de intereses, aún cuando sea solamente una sospecha, aclaración o duda sobre la situación a través del siguiente proceso: