LA MUERTE
“Visito esta escuela
Para llevarme a los Leones
Ya escriban la esquela
La leeré en los panteones”.
CUALQUIER LEONA“¿Es que no lo vislumbras?
Aquí tendrás un fracaso
A perder te acostumbras
¡Que triste es tu caso!”
LA MUERTE“Ya con las Leonas no pude
Mejor me llevo a los Leones
Lo sé, que nadie lo dude,
Esos son bien mandilones”
CUALQUIER LEÓN“¿Qué quieres canija?
Te voy a dar tu trabajo
De la Chin&@da eres hija
¡Vete mucho al carajo!”
LA MUERTE“Tampoco estos se dejan
No me los puedo llevar
Se me hace que me alejan
De mi encargo particular”.
EL TROVADOR“No sé cómo sucedió
Pero en la Metro no hay yertos
Nadie el deceso sufrió
Tan sólo de pan hubo muertos”.
LA MUERTE
“Aquí no hay nada por hacer
Esta gente morirse no quiere
Pierdo de ganar el placer
Si por morir nadie muere”.
EL TROVADOR“Y así quedó la Universidad
Ilesa de la mortal visita
A ella probó su inmortalidad
Vivió sin su esquela escrita.
Ya con esta me despidoDisculpen lo mal trovado
El día de muertos he vivido
Y lo cito sin ser citado”.
BERGERAC
La muerte llegó al equipo sin avisar,
a Raúl el webmaster lo vio pelear,
Con la página en caos y todo al revés,
La muerte hizo su maldad esta vez.
A Hazel le tumbó las redes al instante,
los posts y likes quedaron distantes.
Los diseñadores, con diseños frustrados,
vieron sus artes en calaveras transformados.
Lore y Alexa intentaron negociar,
pero la muerte no iba a ceder al final.
"Me llevo a todo el equipo, es lo mejor,
y dejo la página… ¡hasta el próximo error!"
Raúl Chapa - Webmaster
En la Universidad Metropolitana, en su rincón de creatividad,
el equipo de Mercadotecnia trabajaba sin parar.
Con laptops y gráficas, todos muy concentrados,
no imaginaron que la Catrina los tenía vigilados.
La huesuda los miraba con interés,
por sus campañas tan brillantes, que dan de qué hablar.
“¡Estos creativos no me escaparán!”,
dijo la Catrina con risa de ultratumba mortal.
Llegó al salón y les dijo sin temor,
"¡Dejen sus laptops y ese montón de color!
Les haré campañas en el más allá,
donde el marketing eterno pronto comenzará!"
Asustados, intentaron negociar,
con estrategias y memes para poderse salvar.
Pero la Catrina firme les contestó:
“En mi panteón todos tendrán su show”.
Hoy en la UMM los recuerdan sin cesar,
por las campañas de ultratumba que no dejan de asombrar.
Y aunque ya no están en la universidad,
en cada publicación sigue su creatividad.
Anónimo
En la UMM todos esperan,
el pago que nunca llega,
pues Recursos Humanos,
¡de tanto prometer se ciega!
Catrina pasó en octubre,
a ver si el pago venía,
pero al ver que no hay dinero,
se fue riendo todavía.
"Dicen que es este jueves,"
rumores al viento vuelan,
pero al llegar cada quincena,
¡solo excusas y novelas!
Así que, queridos de RH,
pónganse ya las pilas,
que si no cae ese pago,
¡será con ustedes la fila!
Anónimo
Los de Marketing festejaban mientras la muerte los miraba.
Ellos no lo sabían, pero siempre los acechaba.
Un día se les apareció, pero ellos no sintieron nada.
Pues de susto curados ellos estaban.
La muerte sorprendida no comprendía lo que pasaba
Se tuvo que ir sin decirles nada.
Anónimo
En la Universidad Metropolitana de Monterrey,
la Catrina andaba buscando quién se fue;
sabía de un equipo creativo sin igual,
en Diseño y Marketing, ¡su talento es mundial!
A Guille y Judith, creativos sin fin,
los halló diseñando en su rincón juvenil;
con Nadia, Bryan y Alexis en su labor,
la Muerte pensó: “¡Este equipo es lo mejor!”
Raúl, el webmaster, muy concentrado,
en su mundo virtual estaba clavado.
“Te haré mi programador estrella en el más allá,”
le dijo la Huesuda, y él solo rió sin más.
Brandon, cámara en mano, grababa a placer,
hasta que la Catrina lo vino a ver;
"Ven, productor, a mi show tan genial,
que en el inframundo serás inmortal".
Alexa y Lorena, de Marketing, geniales,
hacían estrategias fuera de lo normal;
la Muerte encantada las invitó sin cesar,
“¡Sus campañas mortales voy a contratar!”
Y así el equipo UMM pasó a la historia,
donde la Muerte les da su gloria,
creativos, marketeros y genios del diseño,
¡en la eternidad siguen siendo el sueño!
Anónimo
En la UMM, una vez vivió
un equipo que siempre destacó,
Marketing era su nombre,
y al diablo asustó.
Hacían campañas, eventos sin parar,
todo por la UMM, sin descansar.
Dieron su tiempo, esfuerzo y pasión,
hasta que la Catrina los vio con admiración.
"Este equipo me llevo hoy," decidió con emoción,
pero dejaron su legado en cada rincón.
La UMM brilla por su entrega y amor,
¡el equipo de Marketing fue un verdadero honor!
Anónimo